El detector capacitivo detecta sin contacto metales, plásticos, vidrio, cerámica, madera, papel, aceites, grasas, agua y todos los materiales acuosos, y los indica mediante una señal de conmutación.
La acumulación de residuos, los cambios en el material, etc. se indican directamente en el sensor, para poder reajustar el punto de conmutación, si es necesario. Esto permite detectar y subsanar con antelación los errores incipientes y minimizar el riesgo de averías o desconexiones.
El detector capacitivo KI0024 está siempre cerca del punto de interés. Su distancia de conmutación entre 1 y 25 mm lo hace apto para prácticamente todo tipo de condiciones de montaje y le proporciona una gran flexibilidad para utilizar en un gran número de aplicaciones.
Estos sensores fabricados por IFM tienen una resistencia notable. Las interferencias, la suciedad, el polvo y la niebla del aire ambiental les afectan tan poco como las interferencias electromagnéticas. Se pueden emplear en aplicaciones de montaje automático.
Especificaciones:
Ajuste sencillo del alcance por medio de potenciómetro.
Con etapa de salida AC/DC combinada.
Técnica de dos hilos.
Alta resistencia a las interferencias.
Función de salida NA/NC programable.
Características técnicas:
Función de salida. Normalmente abierto. Normalmente cerrado.
Corriente de carga mínima: 5 mA
Frecuencia conmutación AC: 25 Hz
Frecuencia de conmutación DC: 40 Hz
Alcance: 15 mm.
Temperatura ambiente: -25, 70°C
Grado de protección: IP 65
Peso: 137 g
Carcasa: tipo con rosca.
Dimensiones: M30 x 1,5 / L = 125
Accesorios: 2 tuercas de fijación, 1 destornillador